A ciencia cierta, nadie sabe el tiempo que tomará superar la perdida de un ser querido, ni tampoco la profundidad de sentimientos de cada cual para, transcurrido un tiempo, hacer borrón y cuenta nueva y hacerse a la idea que ya no hay vuelta atrás y que ya no hay más remedio que resignarse a que esa persona que ya no está y que durante mucho tiempo formó parte de tu vida y que gracias a sus enseñanzas hoy estás aquí no la volverás a ver más, solo en fotos, algunos vídeos familiares y principalmente en tus recuerdos y pensamientos.

Ironías de la vida. Diariamente te despedias en la mañana de esa persona cuando ibas al trabajo y al llegar en la tarde siempre te recibía con alegría. Hasta un día, en que saliste y al regresar en la tarde solo encontraste silencio... Y al paso de los días más silencio. Un tipo de silencio que tal parecía que te habías quedado sordo. Lo único que quedaba era mirar las cuatro paredes de la casa y pensar, meditar, tratar de comprender el porqué, pero muy dentro de ti lo sabes, pero no lo aceptas, no así, no tan repentino.

En parte se entiende a las personas que tratan de apoyarte sicológicamente diciendo que es la ley de la vida, que hay que seguir adelante y etc. Una parte se entiende, pero la otra parte es algo difícil de superar, al menos de una forma tan rápida. Quizás con el tiempo, pero aunque pase el resto de la vida, es algo que no se olvidará jamás.

A veces, con la rapidez que vivimos en el mundo, perdemos de vista a personas que tenemos muy cerca y aunque la amamos, quizás no lo demostramos tan profundamente como se debiera o como se quisiera. Luego de esa pérdida, regresamos a ese momento, en que no le dijimos, en que se quedaron cosas pendientes por decir y hacer... En fin. Al menos es un peso que pude aligerar mucho antes de... Se que en algún lado estará orgullosa.

¿Y tú? ¿Cómo superas una perdida?

Nota: Se que es un tema algo sensible, pero a veces es bueno nutrirse de las experiencias de otras personas para tratar de enfocarse nuevamente en el futuro.