Ahhhhh!!!! Este ¨ah¨ significa el susto de él que mete la mano en la boca del cocodrilo dormido y reza porque no la cierre antes de sacarla, debido a lo complejo del tema.
Hasta donde sabia, luego de regresar de Pekín, es que el servicio militar para mujeres era algo opcional, aunque en la última movilización en la que estuve, notamos que había ¨nuevos cuerpos femeninos en la unidad¨, no las ¨cantimploras¨ que existían antes. Tanto así, que había algunos pensando en quedarse unos días más en la unidad (con la boca hecha un pantano). Incluso, entablamos amistad con algunas oficiales recién llegadas. Había otras algo más… toscas, que no querían ningún tipo de ¨guara¨ (seguro iban de líderes de pelotón). Hay que informarse ahora y ver hasta donde es cierto eso de las mujeres al SMO.
Una vivencia corta.
Resulta que en el tiempo que estuvimos ahí, entro un nuevo llamado al SMO. Muchos adolescentes que venían de distintos municipios de la capital. Los de mi grupo le gritaban ¨podridos¨.
De más está decir que muchos de ellos, estaban ahí más verdes que el uniforme, otros estaban colorados y los restantes con los ojos aguados. A los que andaban lloriqueando le decían ¨futuro rajado¨. Y para que vean, la mayoría se le daba de guapo por su zona, según los cuentos que nos hacían sus compañeros. ¨Deja la flojera, rubio¨, le decían. Seguro que si aparecía la madre de alguno por ahí, se rajaba en llanto (eso no fallaba). Nosotros, le dábamos consejos, aunque algunos los cogían para el trajín:
No dejes que se te monten encima. Por aquí hay un oficial que le hace la vida imposible a los reclutas. Le dicen Cabo Cheo Cuadrado (mentira, era un invento). Pone a los nuevos a limpiar esteras de tanque y letrinas. Si te obliga a eso, le metes un ¨piano¨.
A estas alturas, los reclutas que escuchaban la historia, estaban con la pupila dilatada y hacían con la nariz ¨SNIFF¨, aguantando el llanto inminente.
Al final, hicimos la tarde, porque ese día se comenzó a pelar a los nuevos. Siempre hay algunos tratando de imponerse:
A mí el 3 por arriba, el 2 por al lado y el 1…
El ejército no es una exposición de peinados ni estilismo – decía el barbero (regularmente, cogían a cualquiera que hiciera de quita pelos, no importa si sabía pelar o no).
Resumiendo, le raspaban el cráneo y pa fuera. Había uno que era Rasta cristiano, nazareno o familia de Sansón, que después que le tumbaron la mata de pelo que tenía, lo guardo todo en una caja de zapatos y se lo llevo. Afuera de la barbería (quita pelos) la pataleta estaba a la orden del día al ver lo extraños que habían quedados todos después del pelado.
En fin. Tengo varias historias, no solo de eso, sino de mi tiempo en servicio. Es una etapa dura, pero tratamos de sacar provecho de todo, incluso sin quererlo, se hicieron buenas amistades, llego un momento en que nos unimos entre todos para superar los peores momentos vividos, pero eso fue parte de nuestra preparación. Así como ahora, había muchos que no estaban de acuerdo con pasar el SMO, pero poco a poco encontramos la manera.
Salu2