Cómo estará el cerebro de una mujer que acepta y disfruta de tener sexo con una persona especial, pero que tiene miedo o DESAGRADO a que su hijo salga así?¨
Es que a mi me maravilla la simpleza con que vemos la vida a veces, y lo fácil que juzgamos. La vida es demasiado rica para intentar meterla en un cajón, está demasiado matizada. ¿No sabes que se puede amar y sentir miedo a la vez? Una cosa es tener sexo y otra cosa distinta es tener hijos, tenemos sexo con varias personas a lo largo de nuestras vidas, pero no todas nos resultan la persona con la que queremos hacer una familia, es lo más normal del mundo, y no hablo de personas especiales, hablo de las personas "normales" con las que nos vamos encontrando por ahí.
Un hijo es algo diferente a todo lo demás, por un hijo se teme siempre, preguntale a cualquier madre cuantas cosas pensó cuando supo que estaba embarazada, cuanto temió que su hijito no le saliera saludable, que tuviera alguna anomalía, pregunta a cualquier madre cuando piensa cada día en que su hijo que sale de casa le regrese intacto. La madre siempre teme por su hijo.... cómo puedes comparar eso con el sexo?
Y nada, lo único que me puedo responder es que debe ser alguna parafilia. Incluso la acabo de googlear:
Abasiofilia: excitación sexual y preferencia por personas discapacitadas.
No, no es una parafilia. La parafilia se refiere a personas que sienten excitación sexual por estas especiales, su condición es lo que les excita, más allá de la persona. No es el caso ni remotamente. Este caso va de una persona que conoce a otra que tiene virtudes que le atrapan, pero que resulta ser una persona con características especiales. Pero le enamoraron sus virtudes, no su condición. Eso no es parafilia.
Aclárame algo, lo de no poder llevar vida plena fue después del embarazo, pero sin la barriga si se sentía plena con él? Necesito ese dato para poder emitir un juicio sobre ella (Daniela).
El caso de Daniela es triste, y difícil. Daniela conoció a Miguel casualmente en un parque y le cautivó su timidez, su naturalidad, y el hecho de que la tratara como ningun hombre lo había hecho antes: con delicadeza. Miguel es diferente, le regala flores de papel y sabe la hora por la posición del sol. Ella ni siquiera se percató de su problema, simplemente pensó que era un chico tímido, poco común. Cuando se entera de su problema empieza la disyuntiva, está enamorada, pero tiene a todo el mundo en contra de la relación, nadie la entiende (menos una amiga), tiene miedo, se siente insegura, pero decide intentarlo de todos modos, contra todas las banderas. Poco a poco se va dando cuenta de las diferencias, de lo difícil que es hacer vida social con él, sigue con él pero nunca deja de tener dudas de si está haciendo lo correcto o no. Luego viene lo del embarazo, y siente miedo ¿Puede una persona así ocuparse realmente de la paternidad, cuando él mismo a veces es como un niño? Te repito, no es lo mismo amar y tener sexo que concebir y criar un hijo. Entonces decide abortar, le duele, lo sufre, sigue queriendo a Miguel... pero entiende que no es lo que necesita. Antes del embarazo se sentía plena íntimamente, emocionalmente quizás, y sexualmente... pero no socialmente. Esto obviamente se agrava cuando se da cuenta de que la situación puede tornarse aun más compleja.
Esta es una de las tramas que más me llega, por los dos, por lo dura que es la vida con nosotros a veces.
Igual la novela nos trae después otro giro, no se, y salva la relación. Pero te digo mi Ryu, la vida no es una historia romántica, la vida es dura, y está llena de decisiones difíciles, muy difíciles, en las que, hagamos lo que hagamos, salimos perdiendo.