Yo eh tenido varios y les eh cogido mucho cariño de niño, la mayoría aún los conservo. Un muñeco del tamaño de mi palma actual que se puede poner en la posicion que desees y tiene pinta de prota coreano delgado y con cara de modelo, ese era como el prota de las aventuras que creaba cuando era niño, se le rompió un pié y para mi fue como parte de la historia, era como que estaba cojo pero seguía luchando... También tengo que mencionar a una muñeca de Minnie, la de Mickey Muose, que tenia los brazos abiertos y un vestido tradicional japones, era de plástico duro, en mi imaginación era como una maestra de artes marciales... Menciones especiales a un muñeco perro grande que le cogí mucho cariño y dormia con el ya que queria un perro de mascota, a un robot grandecito que tenia una espada y todo pero era de plastico malo, a los puzzles de armar dinosaurios y carros con cartón intercalandolos para hacerlos 3d, que mas tarde también participaron en mis epopeyas infantiles, a fichas de dominó para hacer esculturas y practicar tempranamente la arquitectura, a un tigre rarísimo que me compraron en placetas cuando niño y todavía tengo dudas de que animal es realmente, a un pollito con dos huecos debajo que si tapabas los dos huecos con tus dedos empezaba a sonar como un pollito, a una colección bastante completa de soldaditos de plástico que hicieron su base en la escalera de mi casa muchas veces de libretas, cajas y muchas piedras y hojas del patio, a puzzles de armar animales en 3d esta vez de plástico, a cajas de fósforos que convertí en naves espaciales, también a las naves que enseñan a hacer en primaria con hojas de papel, a un cometa verde con un gavilán que tuve, a las sillas de casa de mi abuela que mis primos y yo convertimos en puertas y paredes de nuestra "base secreta"... Seguramente me deje cosas fuera, estoy hablando de los primeros dies años de mi vida y las cosas con las que me divertí lo suficiente como para cogerles gran cariño.